Pequeño relato: Agudiza tus sentidos. ¿Qué hora es?

Mi hermano Félix ha encontrado una chica que le gusta mucho. No obstante cuando hemos visto una foto suya nos hemos dado cuenta de que pasa algo raro: la chica es muy vieja y fea, y él habla de ella como si fuese mucho más joven y bella. Intentamos razonar con mi hermano, pero se vuelve histérico. Félix tiene su visión nublada, y no ve la realidad como tal. Inmediatamente nos damos cuenta de esta certeza, y a este comportamiento sólo encontramos una posible explicación: ha sido hipnotizado.

Mi hermano es cabezota por naturaleza. Yo creo que es genético. En realidad sea una característica común de los seres humanos, pero los hay más empecinados que otros. Cuando él ve una foto de esa chica, sus ojos reciben la imagen real de una poco agraciada y vieja mujer, pero el cerebro humano está entrenado para interpretar lo que ve sin darnos cuenta, y el suyo concretamente ha sido programado para ver al amor de su vida. Así que su mente es lo que finalmente ve. Una mala persona ha debido hipnotizarle con algún tipo de excusa, y manipulado su mente cuando estaba su merced para conseguir este efecto.

Igual que si nos pasara a una persona que no tiene su mente manipulada, cuando le decimos a mi hermano que esa mujer no es lo que él ve, se niega a reconocerlo. Le estamos diciendo lo mismo que decía Groucho: ¿De quien te vas a fiar, de mi, o de tus engañosos ojos?. A cualquiera que le hagas esa pregunta, la respuesta es obvia, y para Félix también. Pero en su caso es peor, porque sus ojos (personificando en ellos a su mente) realmente le están engañando. Y en lo más profundo de su mente, él también lo sabe, pero su mente se resiste a admitirlo. Es lo que se llama, en terminología Orwelliana, el doble-pensamiento: una verdad da lugar a otra visión de la verdad completamente errónea, desechando y olvidando automáticamente la realidad. 2 + 2 = 3.

Pero en alguna parte de su mente, sabe que esa mujer no es tan bella como él la ve. Una parte de su mente sabe la verdad. Y cuando se le confronta con la verdad, su mente lucha por mantener la verdad que actualmente admite como válida. Su mente lucha por tapar la realidad, y por ello mi hermano se pone violento; está defendiendo lo que es suyo. En estos momentos mi hermano Félix se había ido corriendo a su cuarto, probablemente a chatear con tan apuesta muchacha. Y pobre del que se acercara.

Le llamamos, e intentamos hablar con él. No da resultado y se vuelve a poner violento, y no atiende a razones, como anteriormente. Cuando el resto de mi familia, preocupada, ya se da por vencido, intento razonar con él, para a su vez hacerle entrar en razón:

– Félix, escúchame aunque no me creas. Tu eres ingeniero, y a ti te gusta la lógica, y razonar, siempre te ha gustado. Puede que te parezca una locura lo que nosotros te intentamos decir, y puede ser bien cierto que nos hayamos vuelto todos locos y tu seas el único cuerdo que queda en esta sala. Pero somos tu familia y merecemos que nos escuches. Verás, has sido hipnotizado para creer algo que no es cierto y tomarlo como la verdad. Sin duda es una locura, y lo es tanto para tí como para nosotros. Pero a ti te gusta la lógica, te gusta la ciencia. Así que juguemos.

Cuando alguien es hipnotizado, su mente entra en un estado parecido al de la mente cuando uno entra en un sueño. Ve todo lo que le rodea como si fuese real, y aunque no lo sea, no se plantea esta opción. Muy probablemente la capacidad de ser hipnotizado es debida y va estrechamente ligada a nuestra habilidad de soñar. No obstante, a diferencia del sueño, la mayor parte de lo que ves cuando estás hipnotizado es real, y la mayor parte de lo que ves como normal es normal. Así pues, en el hipotético caso de que una persona esté sometida a hipnosis ¿Cómo puede darse cuenta?

No lo sé, porque no soy ningún tipo de experto en hipnosis. Pero si mi tesis es cierta y esa mujer tan guapa y joven no lo es en realidad, es necesario averiguarlo. Sabes como yo que en los sueños cuando eres consciente de que estás soñando éste hecho se llama sueño lúcido, y normalmente te despiertas con facilidad de un sueño de este tipo. Nuevamente, si mi tesis es cierta, esperemos que ocurra lo mismo cuando alguien está bajo hipnosis y se vuelve consciente de ello. Cuando estás en un sueño, un truquito para averiguarlo muy conocido es averiguar qué hora es. Cuando miras la hora en un reloj en un sueño, luego aparta tu vista del reloj un momento  y vuelves a mirarlo, el reloj ha cambiado su hora siempre, y además probablemente pone horas sin sentido del estilo: 33:71. Esto es parte fundamental de la forma en que funcionan los sueños: ocurren cosas sin lógica ninguna, pero no te das cuenta porque no te lo planteas y por tanto eres inmune a ese tipo de fallos en la realidad. La idea de los que persiguen darse cuenta de si están experimentando un sueño lúcido es darse cuenta de esos fallos en Matrix ¿Sabes qué hora es sin mirar el reloj Félix?

En estos momentos mi hermano se pone muy nervioso y busca un reloj donde mirar la hora. Confieso que yo mismo me pongo algo nervioso. Le contesto yo mismo:

Por como está el sol y el rato que llevamos despiertos, y dado que es verano, deben ser las siete y media de la tarde. No obstante este tipo de pistas sobre cosas que fallan ocurren en los sueños y puede que no ocurra igual cuando estás hipnotizado. Sabemos por las películas y por aquel día que fuimos a un espectáculo de hipnotismo que cuando te hipnotizan cierras los ojos, y escuchas una voz que primero te relaja y te deja indefenso, y luego te dar ordenes cuando estás hipnotizado. Esa voz probablemente intenta asemejarse a la voz de nuestra consciencia para llegar a suplantarla temporalmente. Cuando estas hipnotizado, es de suponer que nuestra consciencia real habrá sido doblegada por la voz del hipnotizador y dirá lo que éste último le ordenó decir.

Por otra parte también sabemos que cuando te hipnotizan, a diferencia de como pasa en los sueños, muy probablemente el 99% de las cosas que ocurren son reales. Se mezcla realidad e imaginación. Para diferenciar lo uno de lo otro, si estás realmente hipnotizado, agudiza tus sentidos. Si no lo estás no sufrirás ningún tipo de penalización por intentar hacerlo así que por favor inténtalo. Intenta escuchar esa voz de tus consciencia de forma consciente, intenta escuchar que dice y averiguar si eres realmente tú. Intenta también escuchar mi voz con atención, y fijarte en los detalles: de donde viene, el tono de voz, quien habla..

De repente, me encuentro a oscuras tumbado en mi cama escuchándome a mí mismo balbuceando, e inmediatamente dejo de hablar. Todo ha sido un sueño. Intento abrir los ojos que tengo pegados con las legañas, y averiguar qué hora es no por saber si estoy en un sueño o estoy hipnotizado, que cuando estás despierto es evidente que no es así (tan evidente como cuando estás soñando o estás hipnotizado, pero cierto esta vez, supongo), sino para saber si debo seguir durmiendo. Noto que entre las rendijas de la persiana se cuelan algunos haces de luz y por tanto es una hora digna para levantarme.

Me voy a la cocina a desayunar, a hacerme mi zumo de naranja y tomar leche con cereales, mientas me asombro del sueño tan surrealista que acabo de tener, a la par que pasa el tiempo y rápidamente voy olvidando detalles del sueño. Mientras desayuno,  se me ocurre pensar en el significado de este sueño,  e incluso me acuerdo de otro sueño que había tenido esa misma noche. Creo que en el sueño que aquí he contado, mi hermano me representa a mí mismo – quien mejor que mi hermano gemelo para actuar por mí – y lo que es peor, yo también hago de mí mismo, pero intentado despertar a mi otro yo. Objetivo cumplido, pienso.  Cuando termino de desayunar, escribo este relato.

2 Respuestas to “Pequeño relato: Agudiza tus sentidos. ¿Qué hora es?”


  1. 1 Felix marzo 13, 2009 a las 12:47 pm

    ¡Sí que tienes sueños raros pero raaaaaaros raaaaaaaros!

  2. 2 Rafa Vargas marzo 13, 2009 a las 1:40 pm

    Parafraseando a «El Carnicero» de Gangs of New York: ¿Es que el jugo de coño te ha secado el cerebro?


Deja un comentario